Esta entrega de Edificios con Historia lo protagoniza el Hospital Noble, con un origen cargado de correrías y ligado siempre a la solidaridad de esta ciudad. Un edificio emblemático de la zona de Málaga Este que se alza entre la plaza del General Torrijos y la plaza de toros de La Malagueta.
El Hospital Noble fue construido entre 1866 y 1870 por las herederas del doctor Joseph Noble, un prestigioso doctor inglés que murió de cólera estando de viaje en Málaga. Su creación tuvo la finalidad de atender tanto a los malagueños como a los extranjeros que llegaban al puerto de Málaga.
Concedido gratuitamente el terreno para su construcción, una vez terminada la obra se entregaría el edificio a la Beneficencia municipal, con la sola condición de que si se dejase arruinar o se aplicase a cualquier finalidad no benéfica, la propiedad del inmueble y el terreno recaerían en los herederos del Dr. Noble.
El terreno solicitado era propiedad municipal y su proceso de creación no fue fácil, duró cinco años. El origen del expediente de dicha instalación sanitaria, puede datarse en el Cabildo celebrado el 19 de mayo de 1865, en esa sesión se leyó la instancia y memoria que había remitido el cónsul británico, Guillermo Penrose Marck, proponiendo la construcción de un hospital. Se pedía concesión gratuita de terrenos al Ayuntamiento.
La cantidad destinada a este fin era de 20.000 a 25.000 duros. Así, el Ayuntamiento acordó ceder de los terrenos de Propios de la Malagueta y aceptar la donación. Las obras finalizaron en 1870 y se firmó la escritura de cesión a Málaga del Hospital Noble.
Arquitectura y apertura del Hospital Noble
Obra del arquitecto José Trigueros y Trigueros. Fue construido en ladrillo visto, con arcos ojivales y una crestería de hierro sobre las cubiertas. En su fachada principal el hospital presenta un pórtico con un gran arco de piedra y sobre él una lápida con la inscripción «Hospital Noble«. El edificio es de estructura sencilla, compuesta por una nave longitudinal con un pasillo central, por la que se distribuyen distintas dependencias. Dos cuerpos laterales idénticos, destinados a casa de socorro. La capilla fue inaugurada cinco años más tarde de la apertura del Hospital, el 12 de agosto de 1875, fecha en la que se celebró la primera misa con asistencia del gobernador civil, Eduardo Garrido Estrada. En la Capilla tiene su sede hoy en día la Hermandad del Descendimiento.
En los jardines además de una bonita fuente, hay árboles centenarios de varias especies.
Los cambios en su gestión
La gestión del Hospital Noble también sufrió cambios con la llegada de diferentes acontecimientos, como fue en el año 1875, cuando el ayuntamiento cedió la administración del Hospital a una Junta de Damas, que cooperaban con las hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl. Ellas se hicieron cargo de los gastos. Pero desgraciadamente la Junta quedó sin recursos y el Ayuntamiento hizo entrega del Hospital Noble a la Asociación de Señoras.
Sin duda alguna el acontecimiento histórico que más marcó la historia del Hospital Noble fue el naufragio frente a la costa malagueña del buque alemán Gneissenau, que tuvo lugar el 16 de diciembre de 1900. Aquella tragedia no sólo puso a prueba la capacidad del Hospital Noble, que llegó a ingresar a cientos de marineros afectados por el accidente, sino que además permitió que el centro cumpliera con creces uno de los objetivos para lo que fue concebido, la atención a marineros extranjeros que necesitaran atención médica.
Aquellos actos de orgullo de la ciudad de Málaga quedaron rubricados por la donación del gobierno alemán del Puente de los Alemanes, además de la donación de material sanitario, camas y enseres para el Hospital Noble.
Permanecería intacta su actividad hasta el año 1923, cuando el edificio fue entregado a la Junta de Damas de la Cruz Roja durante la dictadura del General Primo de Rivera y ya en la II República sería cuando sufriría más cambios, ya que además de apartar a las religiosas del cuidado de los enfermos, su nombre cambió pasándose a llamar Hospital Municipal. Sería tras la Guerra Civil cuando recuperara la normalidad y continuara atendiendo a enfermos de la beneficencia.
En la década de los 60 llegaría su ampliación, donde además de ampliar instalaciones, se instaló el laboratorio químico y la farmacia municipal.
El hospital Noble en este siglo
Precisamente la historia de la farmacia municipal, que tuvo carácter benéfico, fue objeto de una apreciable rescate entre los años 2009 y 2010. En primer lugar, porque desde la concejalía de Medio Ambiente se restauraron y recuperaron muchas de las fórmulas, mobiliario e instrumental de la botica, que permanecían enterrados en los sótanos del Hospital Noble.
Cuando el Hospital Noble perdió el uso para el que fue creado, durante la década de los 80, muchos fueron los que se manifestaron en contra de la pérdida del Hospital Noble como infraestructura sanitaria para la ciudad. Tal y como se dejaba escrito al comienzo de éste, si su uso no fuera para una labor sanitaria, pasaría a manos de los herederos del Doctor Noble. Pues bien, eso no fue respetado y tras la aprobación de la Ley General de Sanidad, se anuló tal competencia, quedando en manos del Ayuntamiento, el edificio y su gestión.
A cambio, el Ayuntamiento comenzó a trasladar allí algunas de sus dependencias y oficinas municipales como Bienestar Social, Medio Ambiente, Comercio, Vía Pública o Emasa. En la actualidad, todos estos servicios se han trasladado a otros edificios municipales salvo Emasa, que mantiene allí su sede.
Continuamos nuestro paseo por la calles de Málaga, buscando la historia de nuestra ciudad en sus calles y edificios. Una historia que debe ser contada y que no sea olvidada.
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